Mi
día loco empezó con despertando encima de un sofá en un apartamento de
lujo. En el suelo había James Franco y más lejos fue mi amiga Jill y un
vagabundo se llama Bob quien estaba comiendo tortitas. Pero Bob no es
importante. En mi bolsillo había una caja con una nota que decía: "Carl
Smith... 32 y 6 ... La Continental…por 11am". Era diez de la mañana .Les
desperté a los otros y les pregunté si sabían que la caja era. Además,
¿dónde estaba? James dijo: "No sé, pero vamos a darle a Carl.” Pues,
comimos las tortitas que Bob amablemente hizo, y salimos. Decidimos usar
un taxi. Entramos en uno y Jill me dijo, “¿Qué está en la caja?”Lo
abrí. Habia un “flash drive”. Entonces, el piloto dijo, “¡Dame todo su
dinero!” James dijo, “¡No me faltes el respeto!” y le dio un cocotazo.
Fue muy cómico. Nosotros corrimos y decidimos caminar el resto del
viaje. Finalmente, llegamos a La Continental. El portero amable nos
llevó al apartamento de Carl. James golpeó en la puerta y un hombre lo
abrió y dijo, “Lo tienes?”. Yo dije “Pienso que sí. ¿La caja?” Carl tomó
la caja y nos dio cuatro mil dólares. Y eso fue el fin de eso.
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